lunes, 18 de junio de 2012

VRAE: Gobierno asesora a autoridades en proyectos de inversión


Un equipo técnico del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) brindó asesoramiento a responsables de la Oficina de Programación de Inversiones, Unidad Formuladora y Área de Presupuesto, de los gobiernos regionales de Huancavelica, Ayacucho, Junín y Cusco, así como de los municipios locales para acercar el Estado a las localidades delvalle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE).
Se impartió instrucciones sobre un conjunto de principios, métodos, procedimientos y normas técnicas para certificar la calidad de los referidos proyectos con el objetivo de elevar la calidad en la presentación de Proyectos de Inversión Pública, para facilitar su viabilidad y por ende, elevar el nivel de ejecución de gasto en estas jurisdicciones.
"Las inversiones en saneamiento, transportes, educación y salud, son imprescindibles en estas regiones de nuestro país. Sin embargo, los proyectos que venían siendo presentados, en su gran mayoría, no focalizaban las inversiones desde el punto de vista territorial e impacto, por lo cual son rechazados por el Sistema Administrativo del Estado, SNIP", indicó la PCM a través de una nota de prensa.
asimismo, los funcionarios regionales y ediles, calificaron como muy importante la asesoría técnica que incluyó, luego de las exposiciones, la conformación de grupos de trabajo para identificar las reales necesidades de sus jurisdicciones y principales problemas en la presentación de los proyectos de inversión, para su posterior análisis.

sábado, 16 de junio de 2012


El equipo de especialistas de ESE CUCO LLAMADO SNIP, quiere desearles un fuerte abrazo a todos y cada uno de los papás en su día...por ser esa gran mano fuerte que nos enseño el camino a seguir...

domingo, 10 de junio de 2012

Otra vez el SNIP en el ojo de la tormenta


“Oiga señor SNIP, póngase mañana a practicar gimnasia para que baje de peso. Adelgace para que pueda correr tan rápido como el Estado. Usted es el eterno culpable del atraso de la inversión pública en el Perú”. (…ajo…). A pesar de este “bulling”, cuando las olas crecían amenazantes, el SNIP lograba tomar medidas para autocorregirse y ha simplificado los procedimientos. Se corre un poco más rápido, aunque parezca mentira. Los que aún andan a paso de tortuga son los otros organismos involucrados.

Desde su fundación en 2000, los gobiernos anteriores han tomado al SNIP, como un chivo expiatorio de la ineficiencia del Estado para la inversión pública. Lo han hecho tres veces. Hasta hubo un presidente que le soplaron al oído que debía simplificar el SNIP, pero por añadidura logró simplificar el procedimiento para que algunas autoridades llenaran sus bolsillos con los proyectos. La causa fue que simplificaron la rigurosidad en la evaluación. Error conceptual.

El SNIP es parte del sistema administrativo del Estado. No es autónomo, ni omnipotente, ni tiene la categoría de la Contraloría. Esta distinción tecno estructural es oportuna ahora que se habla otra vez de agilizar el Sistema de Inversión Pública. El problema se debe enfocar con criterio multidimensional. El SNIP no funciona si no funcionan -por ejemplo- el OSCE, FONAFE y los propios titulares de los pliegos. Un botón de muestra: SEDAPAL tiene proyectos durmiendo el sueño de los justos hace 4 años en FONAFE.

“Confieso padrecito que El SNIP tiene defectos que pesan mucho en la conciencia”. Puede tener muchos pero el problema central que puede lograr el fin último del sistema es 1) su carencia de planificación y 2) su gerencia deficiente. Por eso ha sido presa fácil de la corrupción y la informalidad. Un caso de Ripley: el Estado nunca solucionó este problema. ¿La causa?: una reingeniería del SNIP cuesta tiempo, dinero y esfuerzo. Se comprende la razón de la indiferencia. Por supuesto que la simplificación es necesaria.

Es importante la autocrítica de los errores y deficiencias que aun tiene el SNIP. El exdirector general de la DGPM (órgano rector del sistema), Miguel Prialé Ugás declaró que “se avanzó demasiado rápido en la descentralización en el nivel local. El proceso pudo hacerse más gradual, lo que hubiera evitado muchos costos de aprendizaje y adaptación de municipios muy pobres que no estaban preparados”. Tiene mucha razón el hoy funcionario de la municipalidad Metropolitana de Lima.

Muchas cosas son buenas en el SNIP. En los últimos años, se ha logrado mejorar la capacitación; pero esta experiencia ha permitido conocer que aún falta mucho para optimizar el rendimiento de los funcionarios del SNIP. Existen lugares en que entre alcalde, formulador y evaluador de proyectos se produce un diálogo de ignorantes. El resultado son los proyectos que “merecieron” ser aprobados y ejecutados. De este modo, muchos PIPs lograron filtrarse, como el “monumento a la Maca”.

Sin embargo, existen deficiencias que por exceso o por defecto afectan al sistema. Una de ellas es la situación laboral del llamado pomposamente Jefe de la OPI. Ingresa con una baja autoestima, cuando se le  ubica en el área de planificación, subordinado a varios jefes y ganando un magro sueldo. No puede aprobar proyectos eficientes, porque debe cumplir con la consigna de la autoridad, para no ser despedido, sin que el SNIP pueda hacer nada por el pobre hombre. La ley no lo ampara. Es una norma tipo  Pilatos. Aquí la corrupción triunfa sobre la corrección.

Otro de los efectos dañinos ha sido la descentralización del SNIP. La transferencia de responsabilidades para aprobar los proyectos a los municipios y a las regiones se ha hecho -como muchas cosas en la historia del Perú- por simple decreto. La realidad es que en muchos casos el personal del SNIP no es idóneo para el puesto. El SNIP estaba más perdido que Adán el Día de la Madre. Esta deficiencia profesional los convierte en cómplices de algunas autoridades corruptas. El Estado olvidó que se trata de procesos y no solo de decretos.

Hagamos memoria. A comienzos del 2011, el MEF anunció con bombos y platillos que “en los próximos tres meses se implementarán modificaciones al Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP)”. Contrataron un equipo de consultores para elaborar un programa integral de mejora de todo el SNIP en “diversos aspectos” El voceado perfeccionamiento del SNIP era cuestión de “cortar” o “recortar” el procedimiento. Por eso, otra vez debemos “simplificar “al SNIP.

 Por carecer de un  Instituto Nacional de Planificación, el Estado no tiene la herramienta para concebir y proponer la política de inversiones, que sirva de base a la gestión de proyectos de inversión pública. En Chile, el SNIP pertenece al MIDEPLAN y las cosas son mejores.  El SNIP, desde su puesta en marcha en el año 2000, se ha caracterizado por ser un sistema administrativo del Estado muy preocupado de la “simplificación”, pero muy despreocupado de la optimización de sus operadores. Es un defecto del sistema.

¿Qué  ha dejado de hacer en el SNIP? Lo más grave. La formación de un capital humano de alto nivel técnico tanto en Lima como en provincias. El SNIP fue dejado a merced de las leyes, reglamentos y directivas con vacíos y deficiencias. El control y fiscalización sobre los órganos del sistema  no ha sido responsabilidad de la DGPM. Esta omisión permitió que el sistema poco a poco fuera creciendo con algunos operadores iletrados que firmaban y evaluaban cualquier tipo de PIPs. Pensamos que el SNIP requiere reingeniar y no solo simplificar.

El análisis técnico-administrativo de la situación, arroja el siguiente resultado. Cuando un organismo como el SNIP, se encuentra en proceso de desgaste organizacional, o entropía, porque sus componentes son impropios y desarticulados (recursos humanos ineficientes), requiere recuperar el equilibrio mediante el proceso de homeostasis. El problema es que inicialmente se pensó con criterio centralista, y después -entre gallos y medianoche- se decretó la descentralización “al caballazo”.

El  MEF con voz de mando dijo: “descentralicen” y la gente exclamó al unísono: “chi cheñó” y se puso a trasladar las piezas desde el centro hacia la periferia, y con sonrisa de oreja a oreja informó: “misión cumplida, señor, el SNIP se ha descentralizado”. Esta gente nunca falta en el Estado.  El caso es que la descentralización del SNIP no es indiferente al conjunto de sistemas administrativos, que se debaten en un proceso complejo de ajustes y reajustes traumáticos en nuestro país. Error técnico que ahora obliga al actual gobierno a volver a “simplificar”.

Por eso, no se ha resuelto el problema de fondo del SNIP.  Las medidas no han sido sistémicas sino componenciales. Si a un organismo entrópico se le aplica una simplificación administrativa solo para reducir los tiempos en los procedimientos, la estructura del organismo continúa con sus problemas de sistema. Lo que se debió hacer es reingeniar el sistema. “Dejar pasar dejar hacer” fue una irresponsabilidad. El SNIP debe ser convertido en una herramienta de inclusión social. El congreso debe revisar la ley con sentido integral.

(1) Licenciado en administración pública
Reg. CLAD 03074
Maestría en gerencia pública
Periodista
Reg. CPP 2239
Egresado de derecho y ciencia política
Especialista en  proyectos de inversión pública, contrataciones del Estado y Mype
20 años de experiencia como funcionario público
Docente universitario
Autor de 7 libros
E-mail: elcapitanpensando@hotmail.com
Cel: 945889822

jueves, 7 de junio de 2012

Recomiendan priorizar la calidad del gasto para mejorar inversión pública

Proyectos. Expertos precisan que los gobiernos regionales y locales deben dirigir sus esfuerzos a obras que beneficien a los pobladores de su juridiscción.



La actual administración del presidente Ollanta Humala ha reconocido desde sus inicios que el crecimiento de la economía estará sustentada en la inversión privada.
Sin embargo, el incierto contexto internacional y los latentes conflictos sociales podrían retraer parte de esas inversiones dirigidas hacia nuestro país.
Es allí donde el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) se ha propuesto, también, no solo incrementar la inversión pública sino elevar la calidad del gasto.
Al cierre del 2011, la inversión pública representó 4,5% del Producto Bruto Interno (PBI), una contracción de -17,8% respecto al 2010 cuando se alcanzaron márgenes de 5,9%. Estos resultados se vieron influenciados por la incertidumbre electoral, la lenta recuperación en la confianza empresarial, además de que muchas autoridades  de gobiernos locales y regionales recién ocupaban sus cargos.
Según Javier Zúñiga, decano de la Facultad de Economía de la Universidad de Lima, la única forma de hacer eficiente el gasto de los gobiernos locales y regionales es a través del Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP).
"Aunque no les guste es la única manera de exigir que los proyectos sean serios y que el gasto sea real, porque los gobiernos locales y regionales tienen la responsabilidad de mejorar no solo la cantidad de su gasto sino la calidad de este", apuntó.
Advirtió que con el SNIP, las autoridades deben regirse bajo ciertos cánones al momento de gastar, pero además deben capacitarse para que haya proyectos serios de inversión como en infraestructura, saneamiento, alcantarillado, salud y educación.
Según el economista, Alejandro Indacochea, a pesar del impulso que ha dado el gobierno desde el 2011 y de lo que han empezado a ejecutar los gobiernos regionales, la inversión pública solo representa el 30% de la inversión total en el país. La inversión total representa el 20% del PBI.
Agregó que la política de gasto de la inversión pública debe ir acompañada de calidad de gasto porque no se trata de una carrera de quién gasta más sino quién lo hace mejor.
En el Marco Macroeconómico Multianual al 2013-2015, presentado por el MEF, se proyecta para este año una recuperación de la inversión pública de 35,6%, respecto al 2011, con lo que esta pasaría a ser un   5,8% del PBI durante este 2012. Mientras que para el 2015 se estima que la inversión pública sería de 6,5% del PBI peruano.
 
Claves. Según el MEF, el motor del crecimiento del PBI para el periodo 2013-2015 seguirá siendo el gasto privado, en especial la inversión privada, que crecería 11,5%, y alcanzaría el 23,3% del PBI en el 2015. Destacan las inversiones asociadas a proyectos mineros e hidrocarburos.